sábado, 9 de abril de 2011

errores

Nada en el cine que haya merecido realmente la pena. Desde Incendies las obligaciones apenas me han dejado disfrutar de buenas imágenes leyendo las últimas novelas gráficas, Chico y Rita y Agencia de viajes Lemming (muy recomendable), en pantalla grande nada que destacar.


Vista en el Festival de Cine de Gijón, La mitad de Oscar ni siquiera ha llegado a mi ciudad. Lenta, silenciosa y aburrida. Se la juega a la sorpresa final, pero a esas alturas lo único interesante es abandonar la sala.


Nos sobraban dos entradas en el Festival, y para aprovecharlas las invertimos en Dispongo de barcos, broma estúpida de amigos pretendidamente cinéfilos y culturetas que serán los únicos a los que les ha hecho gracia. Comparten ambas a Antonio de la Torre, actor que no acaba de convencerme ni caerme bien.

Dos títulos perfectos para presumir en tertulias vespertinas con gafapastas varios. Lástima haberme operado de miopía, mucho más práctico para la vida deportiva, pero unas buenas gafas molan en según qué ambientes.

Regalo de entradas para ver una película que me recuerda que me he hecho mayor. Mucho dinero detrás. Michael Bay, la Disney y la productora de Spielberg. Y seguro que habrá segunda y tercera parte de una historia tan lineal que parece un punto y recoge todos los tópicos del cine de bueno tímido que se encarga él solo de la amenaza del mundo exterior. Para seguidores de Justin Bieber, si no sabes quién es, abstente de visionar Yo soy el número cuatro.


  Hasta ahora nada digno de teclear en el torrent para repasar haciendo rodillo. Ni la última del director de 300, Sucker Punch, una bofetada directa a la inteligencia y al bolsillo. Diez primeros minutos que prometen, exquisita fotografía y atención al detalle en una historia que unos minutos después está totalmente deshinchada. No sé a quién va dirigida. Promete chicas buenorras que no llegan a las uñas de los pies de las amigas de Victoria o las Agentes Provocadoras y que nada enseñan. Lucha a tope y no sé ve ni una gota de sangre, enemigos zafios. Deplorable. Quizás con un joystick en la mano hubiera disfrutado de la trama del videojuego, pero la película es idiota y así me siento. Si todavía la hubiera pillado Rodríguez, del Toro o Tarantino...


El mundo según Barney promete más de lo que da. Su estética retro no me convenció. La historia poco. No me atrae ningún personaje. La vida de un hombre que hasta físicamente me recuerda al patriarca de los Simpsons. Tripón, borracho hasta perder el sentido y amado por mujeres que no merece. Recuerda su vida, sus tres esposas y qué pudo ocurrir con su mejor amigo, de cuyo asesinato fue exculpado. A mi pareja le gustó.


Así que nada destacable, casi nadie lee estas entradas, y menos un sábado por la mañana, así que puede que alguien repita mis errores. Advertidos quedan.

5 comentarios:

Tantatachán dijo...

Pues aquí estoy yo, un sábado por la mañana. Y a puntito de apagar el ordenata para irme a la plaza de la Concordia con Currito a ver qué está cociendo por allí Intermon Oxfam.

No entraba en mis planes ir al cine, ahora menos...

Por llamarme la atención, quizá la última, aunque estoy deseando que ese tipo de hombres entren en peligro de extinción, y ya puestos (relacionándolo con mi entrada de ayer), que su dominio vital cambie tanto que no le quede otra que adaptarse o desaparecer.

Buen finde!!!

davidiego dijo...

alicia,
en el fondo Barney es buena persona, sólo que se deja llevar y bebe demasiado y entonces mete la pata. Si no bebiese y supiera decir no, no hubiera pasado nada en la película

manuelbinoy dijo...

Qué me dices de Aullido, Howl, la voz de una generación; personalmente es muy recomendable; muy especial, sí, pero muy interesante; sábado por la mañana, tengo fiesta; por eso estoy aquí; un saludo,. campeón.

Unknown dijo...

Pues nada, pasaré todo el sábado en el sofá...

davidiego dijo...

manuel,
no ha llegado aquí, donde la cartelera está inundada de sandeces.
no te olvides de dejar tu apuesta en la porra.

popi,
con lo bueno que hace, en el sofá?
cargando pilas para la media?
que te muerdo!
palabra clave enzym