domingo, 31 de agosto de 2008

TRIPLE OLÍMPICO

Las distancias eran >4.500 metros nadando a veces con olitas y algo de viento, 120km justos y llanos, la mayoría por carril bici y 30km corriendo a dos vueltas pasando en parte por un bosque.
A diferencia de un IM madrugo menos porque la salida es a las 9am, me da tiempo a preparar muy bien los boxes y a tomármelo con calma. Los pros salen 30' antes, Clemente será el tercer triatleta en salir del agua. Después van las pros y luego todos los demás. Una vuelta a un triángulo de 1.200mts (29'... lo mismo que tardo en dar la primera vuelta en LZ y hoy he nadado agusto) y luego bordear la costa para salir por unas escaleras en el puerto. Un total de 1h33' que me desesperan un poco, hasta que llego a boxes y veo muchas más bicis. Transición en 2'30" y cojo la bici para hacer una media de 36'5km/h, en un circuito que parecía un ocho y con viento constante unidireccional. Mucho tramo por carril bici y el repecho más alto de dos metros. Por el kilómetro 100km pienso en terminar y retirarme, estoy muy quemado del circuito aburrido, de ir casi siempre con los mismos chupando rueda y de ese viento que sin ser muy fuerte cansa. Llego a boxes, me pongo los calcetines y la gorra, me doy protector solar, vaselina... dejo todo colocado con mucha calma y tras cinco minutos decido ponerme en marcha hasta donde llegue.
Y de un tirón! he empezado conservador pero no me he parado en ningún momento y poco a poco he empezado a pasar gente, si incluso los dos últimos kilómetros he acelerado y sobre la alfombra he adelantado a más de cinco! Tras 2h35' de carrera he terminado con unas 7h34'.
No sé el puesto y ahora no me importa. Sonrisa y salto en meta con la mano arriba, aún me dura...

sábado, 30 de agosto de 2008

noticias desde Holanda

Capítulo primero. On the road.
Salimos de Salamanca a las dos y media de la madrugada, no nos encontramos a nadie por el camino. Luchamos para no caer dormidos, afortunadamente la conductora aguanta el tipo, aunque a duras penas, se salta el parking de larga estancia y acabamos en el silo D planta 1 plaza 414 de la T4. Facturamos sin problemas aunque me toca facturar la maleta de la bici como equipaje especial. Por el aeropuerto sólo anda la gente de nuestro vuelo, y somos pocos, porque el avión va por la mitad. Casi vemos amanecer desde el avión y llegamos con 20' de adelanto...
Capítulo segundo. Las prisas.
En la cinta de equipajes veo más triatletas. Curiosamente veo cinco mochilas del IM de Zurich de distinta anualidad, una de ellas la mía. Hay más triatletas del Estado, coincidimos los vuelos de Barcelona y Sevilla, todos con la ropa de la "selección". Poco a poco van saliendo las bicis por la cinta de equipajes especiales, todas menos las de mi vuelo...
Perdemos más de una hora esperando que salga mi maleta por la cinta número siete. Protestamos. Nos dicen que está a punto de salir. No sale. Protestamos. Atienden simpáticamente nuestra queja. Dejamos la dirección del hotel y nos vamos.
Llegada al hotel, ducha y salida en busca de comida. Desde el capítulo uno sólo llevamos un café, un colacao y una napolitana como combustible. Me separo de A. y su hermana y voy de caza solo. Tengo dos horas para comer, coger el tren y llegar a Almere que no sé dónde está. En doce minutos devoro una pizza proscciuto y penne a la carbonara. Dejo al camarero flipado y me largo a la estación de tren. Cola para preguntar en que estación me tengo que bajar. Cojo el tren por dos minutos. El siguiente saldrá en veinte. Otros tantos minutos de viaje y al llegar pregunto por ''Almere Haven, Javen, Aven, Afen.." de alguna manera debo decirlo bien porque me indican el autobus número 1 que tarda más de diez minutos por una calle especial para autobuses para llegar a Almere Haven Centrum. Quedan 10' para que cierren la entrega de dorsales. Tras volver a preguntar llego sin problemas.
Capítulo tres. La simpatía.
Lo que yo creía que era una coqueta ciudad dormitorio al lado de Amsterdam, Almere, es una ciudad que tendrá 25 primaveras y 200.000 habitantes cuya construcción más alta tiene dos pisos y que posee extensos parques e incluso un lago. Resultado, es enorme.
Nunca he preguntado más en mi vida y la gente se ha portado como nunca. Muy amables, incluso una chica que paseaba a su hija menor debió verme con cara perdido y ella se ofreción a guiarme, entrando incluso en una librería a por un mapa donde me indicó el itinerario.
Capítulo cuatro. Uff.
Vuelvo a Amsterdam y turisteo con las chicas que ya se han recorrido media ciudad. Cenamos y a las diez Morfeo nos ha herido de gravedad. Llegamos al hotel y allí nos espera mi querida cervelita.
Capítulo cinco. A correr.
Me despierto a las diez. Cierran boxes en dos horas. A pesar del desayuno tan estupendo del hotel engullo lo que puedo y monto la bici deprisa y corriendo, le doy aire en la tienda de alquiler de debajo del hotel y lo que falte lo ajustaré en el tren. El primer intento se escapa delante de mis narices. Pero haciendo tiempo encuentro otro que hace parada en mi destino. La verdad es que entre tanto nombre de cerveza (Amstel, Kronenburg..) no es fácil orientarse. Acabo de montar la tija y el manillar cuando llega el revisor. Me dice que la bici paga suplemento. Le pregunto que cuando es la multa, la bici 6€ y la multa noséquéfaiv, hago ademán de sacar la cartera pero me dice que para la próxima saque el billete.
11:40. He llegado a Almere, pero no tengo idea de por dónde se va a la zona de carrera. Pregunto. Vuelvo a preguntar. Voy por el carril bici como Luke Skywalker con la motojet cazando soldados del imperio. El cuenta marca seis kilómetros y llego a un cruce que me suena de haber pasado con el bus. Pregunto a dos chicas que me aconsejan coger el autobús (sobra decir que por la calle bus sólo van autobuses) pero que desconocen si se puede subir la bici en él. Muy amables suplican a la conductora que finalmente me deja subir en la parte de atrás. Dice minutos de recorrido y son las 12:30 cuando llego a boxes. El destino quiere que sólo vea gente con la camiseta roja de mi equipo por allí. Así es el spanish team, siempre tarde y metiendo ruido. Afortunadamente me dejan entrar con una sonrisa y me recomiendan que el domingo me de más prisa. Qué diferencia con aquellos jueces vascos que cerraron boxes cuando estaba a cinco metros de ellos quince minutos antes de que empezara la carrera.
Son canarios (Manolo Pérez, Sergio y Aarón) que llegaron ayer y han tenido que volver hoy al aeropuerto a por la bici. También a Iván Tejero le llegó la bici un día después. Sanos y salvos nos vamos a la zona de la natación donde nos encontramos al resto de la expedición y aplaudimos a los primeros de triatlón distancia 3.8-180-42'195 que se disputa un día antes del Cto del Mundo.
Epílogo. La infraestructura.
Al revés de lo acostumbrado en otras carreras apenas dan nada al recoger el dorsal. Los dorsales, los imperdibles, un gorro sin numerar ni publicidad, el chip, la pulsera identificadora de triatleta que te deja subir gratis en el autobús y una revista con unos mapas que ni los locales entienden. El viernes hubo un desfile de naciones que según me han contado estuvo bastante bien. El día de la entrega de premios cantará un imitador de Robbie Williams. Por la calle y en la lista de inscritos brillan por su presencia los norteamericanos. Se nada en agua dulce, saliendo de una playa y se llega a un puerto debiendo subir escaleras y correr doscientos metros para llegar a una T1 de cesped como las de antes, sin tienda para cambiarse y con unas 1200 cajas de plástico para dejar las cosas al lado de vallas de obra que sujetan las bicis como pueden (la mía de las manetas de freno de carbono...). Muchos voluntarios y militares ayudando. Dos toldos ofrecen productos triatléticos a precios holandeses, superiores a los nuestros. Parece bien organizado pero se echa un poco de menos la superestructura IM, al ser ésta una ciudad tan extensa no he visto mucho triatleta por la calle y en Amsterdam menos.
He quedado dentro de siete horas con los canarios para salir hacia boxes.
Ya os contaré.
Gracias por los ánimos.
No hay fotos porque los ordenadores del hotel no tienen lector de tarjetas, así que en vez de cuatro fotos os he puesto cuatro mil palabras.

jueves, 28 de agosto de 2008

táctica y estrategia

Siempre he acariciado el secreto sueño de vivir de las rentas. De no tener que trabajar para vivir. Me gusta mi trabajo, muchas veces disfruto, pero no me gusta estar atado a un horario, o tener que aguantar todo, o no poder organizar mis días como más me guste. Sin embargo en esta ocasión no me queda otra que tirar de lo ahorrado desde aquel lejano noviembre. Si hasta hice mil kilómetros de bici en la primera quincena de este mes, con una natación y una carrera aceptable. Pero llevo quince días que estoy cansado, que no me apetece entrenar, que la más débil tentación, esa que lleva tiempo esperando agazapada su oportunidad, me vence. Apenas he hecho nada, seguramente esta sentida debilidad sea más a nivel de cabeza que de cuerpo, pero el domingo tengo que poner a los dos a trabajar. Y no sé si andarán por la labor.

Hoy sesión de carrera y natación, con bochorno y amenaza de tormenta. Hacer maletas, sobra bici por todos los lados y sin embargo me cuesta cerrar la maleta por culpa del manillar. Peluquero, rasurar piernas, supersiesta y ora otra vez a sestear para despertar dentro de un rato y conducir hasta la capital para coger el avión de las siete.
Es su primer viaje en avión y está austada. Es un viaje corto, a un campeonato del mundo, le he dicho. Se ha quedado dormida mecida entre plasticos de embalaje.


Amsterdam nos espera. Hace dos años el regalo de cumpleaños de la triviajera fue visitar el museo de uno de sus pintores favoritos, lo pasamos bien, pero los días eran cortos y lluviosos. Tras visitar el Amsterdam del Sur este verano, volvemos a la Venecia del Norte. Espero que ahora brille el Sol sobre sus canales y podamos visitar algún monumento que estaba cerrado la otra vez. Esta vez A. viene acompañada por su hermana, piensa que voy a estar demasiado ocupado con la carrera y se va a perder sin mi..
Así tendré tiempo para repasar la estrategia:
+ salir del agua,
+ disfrutar en la bici,
+ llegar como pueda.
y cumplir los objetivos:
+ sonreir en las fotos,
+ sonreir quince minutos después de llegar a meta.



A la vuelta descanso total. Quizás no del todo. Soy un chico fácil y una invitación a salir en bici puede ser muy duro de resistir...

lunes, 25 de agosto de 2008

vergüenza

Entre todos la mataron y ella sola se murió.

Trabajo para el Sacyl, uno de los diecisiete sistemas de salud pública de este Estado. Supongo que el resto funcionará parecido.
El caso es que a las horas en que mi indignación se transforma en estas letras recibo a una paciente, nueva residente del Este europeo recién asimilado, remitida por un compañero que trabaja en un PAC (Punto de Atención Continuada) donde en un escueto informe indica que está embarazada, que está borracha y que dado su estado la deriva a un nivel superior.
No hay exploración física, no hay interrogatorio al paciente sobre sus antecedentes y motivo de consulta, para qué, ya se encargarán en el Hospital de hacerlo todo.
Esta paciente viene en ambulancia. Ambulancia pública. Ambulancia que conduce un conductor acompañado por un técnico que a estas horas podían estar descansando para conducir veloces, desde cien kilómetros de distancia por carreteras secundarias, hasta la capital trasladando algo importante, cualquier cosa que vosotros consideréis importante. Sobra decir que durante el viaje de venida al hospital de referencia y el de vuelta a la base, su zona queda desprotegida.
Soy el penúltimo eslabón de esta cadena. Si lo estimo oportuno solicito el concurso de otro especialista.
Como profesionales que somos la recibimos, la constanteamos (glucemia, tensión, frecuencia cardíaca, pulsioximetría) y la interrogo, la exploro y solicito un test de embarazo.
No está embarazada. Ha bebido pero no está borracha, o por lo menos no está intoxicada de tal modo que precise atención hospitalaria. No hay patología, no más que su condición de indeseable en esa pedanía de la frontera.
Cualquiera puede echar hijos a este mundo y que el agua de lluvia los haga crecer fuertes decía A. Cualquiera puede llamar al uno-uno-dos y que le pongan un taxi hasta el hospital más cercano. Yo los veré a todos. Y los devolveré a su punto de origen si no precisan ingreso, claro está en ambulancia, que es como llegaron. Aunque no tengan nada, aunque tengan todo el dinero del mundo. "Porque yo tengo derecho" y porque a estas alturas sé que discutir no sirve para nada, que al final siempre hay alguien más alto que para zanjar el problema firma la ambulancia.
A esta chica la dejaré dormir hasta mañana. No pienso molestar a nadie para que la devuelva al pueblo donde no la quieren.
Todo cuesta. Todo suma. De estas mil.
A ver dónde acabamos.

jueves, 21 de agosto de 2008

las tribulaciones de un no chino viendo la China

... que si hay un nadador que es el mejor deportista de la historia, pues como nadador es una maravilla, el mejor en estos precisos instantes, pero no es mejor deportista aquella que consigue ir a dos Olimpiadas en dos deportes totalmente distintos y conseguir medalla que aquel que arrasa en una sola?

qué bonito

... que si es un fracaso no conseguir medalla por ocho o por veintiocho segundos después de casi siete mil doscientos segundos, una pena, pero de ninguna manera un fracaso. En tal caso el fracaso es la predicción de aquellos que sólo se acercan al deporte cada cuatro años.

... material, entrenamientos y cuidados de última generación, cronometraje de lujo y aún se siguen llevando los dorsales sujetos por imperdibles, y qué decir de esas ridículas pegatinas que nadie sabe dónde ponerse y que indican el número de la calle de los atletas?

zapatillas doradas, clavos ultraligeros, y los imperdibles ¿son de oro?

... que tal vez se haya perdido el espírtu de aquellos griegos. Ya no se suspenden guerras sino que se empiezan nuevas. Esto es una competición de colores que puede acabar pareciendo a un mundial de Clubs, los representantes de un país del cáucaso son de origen brasileño, pero no hay dudas de su origen, la pareja de volley-playa son Geor y Gia. Sinceramente me parece muy bien que mi país gane medallas y es lo que recordaremos pasados quince días, pero no todo el mundo que defiende los colores del estado me emociona. Quizás lo hace más alguien que monta en mi misma bici, es elegante o tiene ese algo que le diferencia del resto. Nacionalizar gente que ya ha competido por otros países no sé que sentido tiene, debería existir un grupo mixto, como en el parlamento. Aunque desde aquí hago un llamamiento a aquellos países que quieran darme su permiso para representarlos en las olímpiadas, sobra decir que pago yo el viaje. Aunque siempre prefiero un mundial de clubs que uno de laboratorios, que es a lo que podemos llegar si no ponemos fin a esto de las mejoras farmacológico-genéticas...


encuentra la diferencia, a mi el pingpong rojigualdo no me emociona

... que me parece muy bien el espíritu de las leyes y que al final es lo que haya que cumplir, pero si está escrito que no se puede hacer tal cosa pues no se puede hacer. Para la próxima cambias la ley y lo dejas por escrito, pero no se cambian las leyes a conveniencia. Que al final la plata está muy bien, pero si debía ser oro...

los daneses Kostov y Cupac en su velero Cro

... que no es sólo el esfuerzo que realizan por pantalla, sino todo ese esfuerzo oculto en los lugares de entreno y en competiciones clasificatorias previas y que parece que nadie recuerda.

cuánto hay detras de los pocos minutos que dura el ejercicio?

... que me parece una tontería el escándalo que han pretenido montar por una foto donde nuestras compañeras de Nadal y los chicos campeones del mundo se alargaban sus occidentales ojos, que estrechez de miras la de estos americanos... como en tantas otras cosas.

si te ofenden mis ojos, léeme los dedos

martes, 19 de agosto de 2008

me estoy quitando...

y como diría el Rober sólo me meto de vez en cuando. Pero no lo puedo dejar. Acabó la semana infernal en el trabajo, la semana con más volumen de pacientes y en la que he invertido setenta y dos horas, más ocho en desplazamientos, de las ciento sesenta y ocho horas que contienen siete días.

Un par de revistas Finisher prestadas para iniciar la siesta, un mensajero que llama a la puerta para entregarme los adhesivos que tunearán bici y casco, las Olímpiadas con la emoción que transmiten sus imágenes, Almere a la vuelta de la esquina, estar de Rodriguez en casa y un sms recibido apelando a las gónadas para completar ruta de 160km con tres puerticos en compañía de un buen amigo (no hace falta apelar a los testes para sacarme a montar en bici y menos en buena compañía) son demasiada tentación para desintoxicarme.

Qué bien me ha sentado aunque la resaca es considerable, ahora estoy esperando a que amanezca, pensando si acostarme hasta la hora de ir de nuevo al curro o coger los bártulos y volver a ponerme en tirada larga...

Los entrenos de la semana los tenéis en la columna de la derecha.

Los que queráis más material duro para soñar en el dos mil nueve echad un vistazo a esta página..


Sitio: http://www.altriman.fr/ (pronto en español)

Josele y Jony entre otros enfermos, nos vemos en Sanabria.

Enhorabuena chicos!


Ocho segundos han separado a los nuestros de las medallas. Una pena porque la han luchado hasta el final e incluso ha habido momentos en que hemos visto a los dos en el podio. Parecía que Javier iba apretándose la tripa como cuando sufrimos flato pero ha seguido tirando como un campeón. Frodeno ha aguantado y le han quedado fuerzas para ganar al sprint a un Whitfield que se había descolgado haciéndonos pensar en medalla segura para luego enlazar con los tres de cabeza. Docherty tercero. Omar en el puesto cuarenta y nueve, penúltimo de los finishers. Nos quedamos sin una medalla de las que vendían como seguras, pero con una gran carrera y dos campeones.

Muchos que hemos madrugado, pensando que por qué no esta vez iba a ser capaz de cambiar de ritmo. Esperemos que a ese supercorazón aún le queden muchas alegrías más que darnos.

1 Alemania 1h48:53.28 Jan Frodeno
2 Canadá 1h48:58.47 Simon Whitfield
3 Nueva Zelanda 1h49:05.59 Bevan Docherty
4 España 1h49:13.92 Francisco Javier Gomez
5 España 1h49:22.03 Ivan Raña

6 Alemania 1h49:43.78 Daniel Unger
7 EEUU 1h49:48.75 Hunter Kemper
8 Dinamarca 1h49:57.47 Rasmus Henning
9 Rusia 1h49:59.38 Igor Sysoev
10 Francia 1h50:00.30 Frederic Belaubre
11 Australia 1h50:10.02 Courtney Atkinson
12 Gran Bretaña 1h50:19.62 Alistair Brownlee


lunes, 11 de agosto de 2008

por una sonrisa


Eso es lo que nos mueve. Provocar una sonrisa a aquellos que queremos. Sonreir nosotros, porque también nos queremos. Sonreímos cuando conseguimos aquello que perseguimos, tanto más cuanto más esquivo nos ha sido y más nos ha forzado a superarnos.

No hace falta ganar una medalla para sonreir. Basta con haberlo dado todo, todo lo que teníamos. Todo lo que hemos ido acumulando durante esos meses de entrenamiento. Aunque no hayamos superado nuestro record personal. En unas circunstancias determinadas, con una determinada preparación hemos dado todo lo que llevávamos dentro.

Y este deporte es de fácil conformar. Podemos hacer una natación deslizándonos como nunca, con una orientación perfecta. O podemos vestirnos y desvestirnos más rápido que Superman. Podemos volar en la bici, escalar más rápido que nadie o adelantar a ese dorsal que siempre queda delante de nosotros. Podemos empezar andando la carrera, pero poco a poco ir haciendo cada kilómetro un poco más rápido. O simplemente no hemos hecho nada de lo anterior, pero somos finisher después de ese día de infierno que nos ha hecho pasarlo tan mal.

Con este calor. Con los Juegos, a determinadas horas zapeando. Con ese libro encima de la hamaca. Con el murmullo de la gente en las terrazas. Quizás con un poco de cansancio mental después de tantas semanas, he salido a trotar un rato. Y me he animado, primera mitad más rápido que en todas las semanas previas, y aún he corrido más rápido de vuelta, contando que es cuesta arriba. Y me han quedado ganas de sprintar. He sonreido. Y he olvidado la desgana de esta mañana en la bici.
Mañana a trabajar todo el día, pero espero encontrar el detalle donde se esconda esa sonrisa. Y no olvidaré compartirla. Las sonrisas compartidas se multiplican. Y saben mejor.

jueves, 7 de agosto de 2008

yo no fui abatido


Me está costando más entrenar estos días de agosto que cualquier otro mes de duro invierno mesetario. Durante las mejoras horas de entreno estoy más agustito en la cama o en una terraza, y a las peores estoy mejor en una hamaca sombreada con una buena compañía. Así que intento sacar adelante los entrenos de mantenimiento, como esa gimnasia que hacen los viejunos y estudiantes de mi gimnasio. Más que nada para que no se me olvide atarme las zapatillas, montar en bici o sacar la cabeza para respirar.


Pero hay que ser un jabato para entrenar con 38 grados y lidiar con un aire que ayer me sacaba de la carretera, a la vuelta de 2horas en las que saqué 38 de media. Por las Zipp que cuando escogía la ruta no se meneaba ni una brizna de paja y que empezó a soplar cuando ya llevaba más de 40km.

Y hablando de jabatos y capitanes trueno. El año pasado finalicé el IM de Zürich, al domingo siguiente estrené el Doble Olímpico de Vitoria-Gasteiz y ya que estaba de vacaciones me apunté a una carrera nueva, de la que poco se sabía y que discurría por las tierras de Milagros...


Unas cuarenta personas nos reunimos alrededor de Diego, alma mater de esta prueba que con gran entusiasmo nos comentaba los detalles. Le faltó trazar un círculo alrededor nuestro, aunque todos sabíamos que estábamos dentro, éramos los aspirantes a no ser abatidos, fuera los nenazaman.


Para endurecer aún más la prueba, la salida de la natación fue a las once de la mañana. Tres mil metros donde no dí ni recibí. Sólo intentar cumplir un metro tras otro, para coger la bici y empezar a rodar por ese mar de Castilla.


Asfalto duro, aire, repechos, mucha soledad, ruido de escopetas al fondo al atravesar un campo de tiro. El Sol iba desperezándose y agradezco la cantidad de voluntarios que me ofrecen avituallamiento. Debe ser única carrera donde existe atención personalizada.


Llego a T2 y me entero que Jony ha sido abatido, también Mikel que acabó en el hospital con sueroterapia pero que antes se dio la vuelta para avisar de una caída con consecuencias de otro participante. Con este calor no me apetece mucho correr, pero ya que estoy aquí.. quiero ser un jabalí. Cuatro vueltas a un circuito que sube y baja un monte atravesando un riachuelo en cada paso por meta. Avituallamientos con agua fría, cien metros de aspersores y el salpicón del río me apartaban de la insolación. Creo que hice una vuelta corriendo, una trotando y las otras dos como pude. Poco a poco me fueron pasando los que aún quedaban detrás de mi, además de ser doblado a velocidades supersónicas por la cabeza de carrera.

Empiezan a asaltarme dudas sobre por qué estoy aquí, me da vergüenza haber cambiado la guardia a A. para venir aquí y ser abatido. Estoy reventado y lejos de meta, así que me da igual, hay que llegar. Mi sombra se va alargando como la del ciprés de los cementerios. El médico de la prueba se ofrece a llevarme en su coche a meta, pero deben de quedar dos kilómetros.. Viene un quad, se alegra de verme, se ofrece a rescatarme.

Quedan 500 metros, me pongo a correr, doblo la esquina, por primera vez en mi vida cruzo la cinta de meta. Me aplauden. ¡No he sido abatido! Soy un Jabalíman. Comienza la entrega de premios, la sesión de fotos con la cabeza de la mascota de la prueba y la cena. Jabalí con patatas, supongo que habrán sido los abatidos, aunque peor lo tienen los nenazaman, no están aquí. Está rico.


Epílogo: Espero que esta prueba se consolide en el calendario. No pienso que haya que alargarlo ironmanizándolo para hacerlo más atractivo, ya lo es, por el circuito, por el ambiente, por la ilusión de Diego al que espero se recupere pronto y no vuelva a recaer.

Un saludo.
Ellas se lo perdieron y dejaron de ser súper.

PD: parece ser que un importante incendio ha arrasado la zona! aunque la prueba se traslade al 28 de septiembre es una gran pena.